Hace cinco años, mi viaje profesional y personal comenzó en Leadership Circle, una empresa dedicada al desarrollo del liderazgo. Fue allí donde descubrí mi pasión por el crecimiento y la evolución, no solo en el ámbito laboral, sino también en el personal. Desde el primer día, supe que estaba en el lugar adecuado para expandir mis horizontes y aprender las habilidades que me definirían como profesional.

Mi tiempo en Leadership Circle me brindó la oportunidad de adquirir competencias de facilitación y coaching que han sido fundamentales en mi carrera. A través de desafiantes proyectos y la guía de mentores inspiradores, aprendí a liderar con empatía y a inspirar a otros a alcanzar su máximo potencial.

En paralelo, me especialicé en el coaching deportivo, trabajando con deportistas de élite y alta competición. Mi experiencia como jugador profesional de baloncesto me ha brindado una profunda comprensión de los desafíos y las metas que enfrentan los atletas de competición. Esta vivencia personal me ha demostrado de manera contundente que el acompañamiento marca una diferencia significativa y positiva en el éxito del deportista. 

Confieso, que siempre he pensado que mi carrera deportiva habría sido diferente si alguien me hubiera acompañado en el camino. Yo no tuve la fortuna de contar con ese apoyo, y es por ello que hoy siento un profundo deseo de ayudar a otros deportistas a alcanzar su máximo potencial

Todas estas experiencias me han proporcionado una visión holística del desarrollo, que va más allá del ámbito laboral y abarca todos los aspectos de la vida.

Hoy, miro atrás con gratitud por todo lo vivido, que me ha moldeado en un apasionado del desarrollo y el liderazgo, tanto en lo personal, profesional como en el deporte. A pesar de los desafíos que he enfrentado en mi trayecto, cada obstáculo me ha fortalecido y permitido crecer aún más. Estoy emocionado por el futuro, donde continúo aprendiendo y apoyando a otros en su búsqueda de un crecimiento integral y la consecución de sus metas.